Todas sin excepción queremos tener un busto tonificado y hermoso, no importa si es grande, mediano o pequeño. El busto nos genera curiosidad, pues no es una zona que se pueda ejercitar acertadamente como otras lugares musculares del cuerpo, esto a debido a que no es un musculo en si, si bien hay músculos pectorales, los senos están compuestos por glándulas mamarias, grasa y colágeno, colágeno que va desapareciendo con los años produciendo el decaimiento del busto.
De todas maneras, no nos desanimemos, hay maneras de mantener por mayor tiempo un busto con una apariencia que nos agrade. Lo primero que debes saber es que la postura es de vital importancia para que el busto no solo luzca caído sino que empiece a descender, por eso a mantenerse erguidas, no solo es bueno para nuestro busto sino para nuestra estructura ósea. Hay ejercicios en casa que nos ayudan a mantener algo de tonicidad en la zona, vamos a explicar algunos.
Antes de empezar, haz un buen calentamiento, para que los músculos se preparen y no sufran ningún tipo de lesión. Puedes usar un peso que controles para empezar, si no hay experiencia previa puedes usar botellas de agua, o botellas con arena dentro.
- Las flexiones de pecho son excelentes para fortalecer la zona pectoral, en un inicio pueden parecer muy complicadas de realizar, pero el cuerpo va ganando fuerza con la repetición. En un inicio solo debes tumbarte boca abajo en el suelo y con las manos apoyadas tratar de subir el cuerpo, es recomendable para empezar apoyar las rodillas.
- Te puedes acostar boca arriba y con los las pesas en las manos formando un ángulo de 90° con los brazos vas a abrir y a cerrar, así vas a sentir como los músculos pectorales se activan y se trabaja la zona del busto.
- Sentada en una silla, bien apoyada y erguida, vas a estirar los brazos a los laterales con las pesas. Vas a flexionar los codos y volver a la posición inicial. Es bueno hacer algunas series de este ejercicio, hay variaciones en las que puedes llevar los brazos hacia arriba casi estirando los brazos y volver a la posición de brazos laterales y pecho abierto.
Ten en cuenta que la actividad física acompañada de una buena alimentación hará que tu apariencia y tu busto mejore día a día.
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