La gluteoplastia, se realiza mediante la aplicación de implantes, y está de moda en muchos países por la posibilidad de mejorar el contorno de la zona, dejando escasas cicatrices en el pliegue interglúteo. Es inevitable que la mirada se dirija hacia allí. Hombres y mujeres se miran la región glútea, y lo cierto es que a ninguna persona le gusta que digan que la suya es: caída, fláccida, chata, alargada, sin forma, gorda en exceso, o simplemente demasiado amplia. El caso es que, aunque suene exagerado, tener una buena cola es una » inyección de autoestima » y es como tener puesta una linda prenda o un buen perfume, pues uno sabe perfectamente bien que el ojo clínico de compañeros de trabajo, facultad, amigos y vecinos siempre va a parar » ahí » en algún momento del día. La gluteoplastia se puede hacer tanto en hombres como en mujeres.
La técnica de la gluteoplastia es la misma en ambos casos aunque estéticamente hay algunas diferencias. En el hombre se trata de potenciar la silueta del músculo glúteo mayor, de forma que la nalga parezca más musculosa. En la mujer, se trata de darle a la nalga la forma más redondeada posible, por lo que la liposucción y el » lipofilling » se asocian casi siempre a la colocación del implante. El implante seleccionado para la gluteoplastia es de gel de silicona cohesivo, y la prótesis es más plana y tiene más resistencia que la que se utiliza en el aumento de mamas. Esto permite que soporte las fuerzas debidas al músculo glúteo mayor (deambular, correr, saltar). La prótesis se va a situar debajo del músculo glúteo mayor de forma que externamente no se notará.
La incisión de la gluteoplastia se sitúa en el pliegue entre ambas nalgas, lo más bajo posible para que quede oculto. La gluteoplastia se lleva a cabo con anestesia general para que el músculo quede relajado y podamos introducir la prótesis fácilmente. No se suelen poner drenajes. En la gluteoplastia es muy importante la colaboración del paciente. El primer día de la gluteoplastia se pasa en la clínica boca abajo. Luego es posible levantarse pero durante 1 semana no se debe estar sentado más que lo imprescindible, y hacerlo de forma que no se comprima la zona donde se realizo la gluteoplastia. Se ha de dormir boca abajo durante un par de semanas despues de la gluteoplastia.
Hay que evitar cualquier tipo de ejercicio físico en el que participe el glúteo durante 5-6 semanas. Todo esto hace que la cicatriz que se forma alrededor de la prótesis quede estable y la prótesis no se desplace con la consiguiente asimetría. La prótesis no se rechaza ni se encapsula. El riesgo de infección es bajo, aunque se requiere una higiene muy cuidadosa hasta que se quiten los puntos y siempre se administran antibióticos durante 10 días tras la cirugía para minimizar el riesgo. El paciente de gluteoplastia con implantes de silicona debe recordar que no deben ponerle inyecciones intramusculares en los glúteos, ante el riesgo de pinchar las prótesis. Finalmente hay que recordar que no se debe acudir a aumentos con inyección de silicona líquida u otros materiales. No es lo mismo la prótesis, que se puede extraer en caso de complicación o por deseo del paciente, que la silicona líquida, que infiltra todos los tejidos, tiene un elevado índice de complicaciones y es imposible de extraer.
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